El aprendizaje más importante que los niños y las niñas adquieren en sus primeros años de
vida es el de su lengua materna, a partir de él, se producen las primeras interacciones sociales,
sentándose las bases de futuros aprendizajes, de ahí que tanto los pediatras como el
profesorado de Educación Infantil y por descontado los padres presten especial atención a la
adquisición y desarrollo del lenguaje así como a sus posibles alteraciones.
Es esta Etapa el momento ideal de prevenir y/o compensar posibles dificultades que pueden
incidir en la evolución infantil, ya que el desarrollo global de las capacidades del sujeto
depende en buena medida de su propio desarrollo lingüístico y de su capacidad de
Es importante, por tanto, conocer los periodos de adquisición y desarrollo del lenguaje y cómo
evolucionan los procesos de comprensión y expresión en la infancia, sin olvidar que la
evolución lingüística hay que contemplarla desde una perspectiva global en la que las
interrelaciones con el resto de las dimensiones es evidente.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el lenguaje infantil es un fiel reflejo del entorno
social en que el niño o la niña se desenvuelve, siendo la imitación del lenguaje de los demás y
el deseo de comunicarse las dos variables que hacen que el lenguaje se forme.
La importancia del entorno familiar: claves para favorecer el desarrollo.
La familia, como marco de referencia y elemento esencial del entorno del niño/a es,
conjuntamente con la escuela, el principal agente de la práctica totalidad de los aprendizajes.
Por tanto, nadie mejor que la propia familia para convertirse en un elemento vital para el buen
desarrollo del lenguaje, mediante una serie de principios y pautas dados por el logopeda,
fáciles de llevar a la práctica a la hora de comunicarse con sus hijos e hijas.
Desarrollo normal del habla y del lenguaje
http://kidshealth.org/parent/en_espanol/emociones/not_talk_esp.html
Es importante que en cada una de las revisiones médicas sistemáticas, hable con su pediatra
sobre el habla y el desarrollo del lenguaje del niño, así como sobre otros aspectos de su
proceso evolutivo que le preocupen. Puede ser difícil saber si su hijo solo es inmaduro en su
capacidad para comunicarse o si tiene algún problema que requeriría una atención profesional.
Las siguientes normas de referencia sobre el desarrollo pueden servir de guía
Es importante observar a los niños de esta edad a fin de detectar indicadores de que utilizan la
voz para relacionarse con su entorno. El gorgojeo y el balbuceo son las fases iniciales del
desarrollo del habla. Cuando los bebés se hacen mayores (a menudo en torno a los 9 meses),
empiezan a unir sonidos, a incorporar las distintas entonaciones del habla y a decir palabras
como «mamá» y «papá» (aunque sin entender qué significan).
Antes de los 12 meses, los bebés deberían ser receptivos a los sonidos y empezar a reconocer
nombres de objetos de uso común (por ejemplo, biberón, chupete, etc.).
Entre los 12 y los 15 meses
Los niños de esta edad deberían tener un amplio abanico de sonidos en su balbuceo (como p,
b, m, d, o n), empezar a imitar y a aproximarse a los sonidos y palabras que modelan los
miembros de su familia y típicamente decir una o más palabras (excluyendo «mamá» y «papá»)
de forma espontánea. Los nombres suelen ser las primeras palabras que utilizan los bebés,
como «bebé» y «pelota». Su hijo también debería entender y seguir instrucciones de un solo
paso («Por favor, pásame el juguete» y similares).
De los 18 a los 24 meses
Aunque hay una gran variabilidad, la mayoría de los niños dicen unas 20 palabras cuando
tienen aproximadamente 18 meses y unas 50 o más cuando cumplen 2 años. En torno a esta
edad, los niños empiezan a combinar dos palabras en frases muy simples, como «bebé llorar» o
«papá grande». Un niño de 2 años debería poder identificar objetos de uso común (tanto cuando
el objeto está presente como cuando se trata de imágenes del objeto), señalar sus ojos, sus
orejas y su nariz cuando alguien se las menciona y seguir instrucciones de dos pasos (como
«Por favor, recoge el juguete y dámelo»).
Los padres suelen presenciar grades avances en el habla de sus hijos a esta edad. El
vocabulario del niño debería crecer considerablemente (demasiadas palabras para poderlas
contar) y el niño debería combinar de forma sistemática tres o más palabras en frases más
Su comprensión también debería mejorar; con 3 años, un niño debería empezar a entender
qué significa «ponlo en la mesa» o «ponlo debajo de la cama». Su hijo también debería empezar
a identificar colores y a entender conceptos descriptivos (por ejemplo, grande versus pequeño).
Fuente: http://kidshealth.org
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